Ni soy escritor ni pretendo serlo. Tampoco un sabio de nada que intente dar lecciones o claves sobre envejecimiento, ni tan siquiera pretendo profundizar en una temática donde gente docta y bien preparada han escrito páginas conocidas que nos pueden ayudar a todos. Soy un peregrino más de la vida que me voy encontrando en ella a otros que, paso a paso, luchan por alcanzar una meta. La vida, tan hermosa y tan dura, tan llena y vacía, tan contradictoria en sí, pero cargada de sentido. En esta vida nos encontramos y chocamos, cantamos y lloramos, vivimos y morimos.
En este peregrinar de la vida, Dios me ha dado la dicha de compartir momentos con gente muy rodada en ella, en especial religiosos que desde su opción de vida han dado muestras de una entrega radical por la causa del Evangelio. Sus vidas ya desgastadas, cargadas de arrugas, me aleccionan y me admiran y hacen que surja en mí un sentimiento de pequeñez, ternura y agradecimiento que se entremezclan.
Estas letras pretenden ser un acopio de los encuentros que voy teniendo en cada comunidad de religiosos/as para dialogar y compartir tiempo agradeciendo “el gozo de ser mayor”. Quienes participan en estos encuentros son, en su mayoría, personas de edad avanzada que siguen teniendo la inquietud y la fuerza de voluntad de aprender a envejecer, de intentar cambiar aspectos de su vida ya acomodados u oxidados, y por ende, que buscan hacer mejorar el ambiente comunitario, relacional, social… Unos con mejor carácter que otros, unos con más patologías que otros, algunos más animosos que otros, pero sea como sea, ahí están y solo el hecho de esforzarse, de luchar, de continuar su vida, es un ejemplo para los demás y para mí.
Serán unas letras sencillas, expresión de lo que yo soy, pero que espero ayuden, a aquellos que han participado en estos encuentros, a seguir profundizando en la parte esencial de lo que significa el ser humano, buscando en el interior de lo que somos lo mejor de nosotros mismos. Solo desde esa búsqueda interior podemos seguir creciendo y alcanzando la meta programada.
Como comprobarán en entradas sucesivas de este Blog, estas reflexiones están escritas a modo de taller. Consta de reflexiones y preguntas. La intención es que, de esta lectura personal y la respuesta a estas preguntas formuladas, u otras que se quieran hacer, pueda surgir un mayor y mejor conocimiento personal, y por ende, comunitario. Que estas letras puedan servir para debatir, para hablar, para conocerse, para intercambiar opiniones, para trabajar en reuniones comunitarias, o simplemente para que uno mismo lo pueda utilizar como estime oportuno.
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3 comentarios
Queridos amigos,
Tan sólo decirles que me gustan mucho vuestras reflexiones y las leo con gusto,
Algunas las copio y las comparto con los grupos que acompaño.
Muchas gracias por enviármelas.
Que el Dios de la Vida y de la Historia les bendiga y que pasen un buen verano…
paloma
Estoy leyendo algunos artículos o sugerencias del blog y me parece muy instructivo y aleccionador. Gracias
Mariasun rscj
Deseo que me sigas enviando todos tus escritos aunque deje de ser delegada. Siempre los he utilizado con las hermanas y nos han ayudado mucho. Quiero agradecértelo y seguir la comunicación con vosotros. Un saludo. María Isabel Hitos